domingo, 2 de octubre de 2011
Koan Zen: "El ganso está fuera"
El maestro le dice al discípulo que medite sobre un koan. Meten un ganso pequeño en una botella y le dan de comer. El ganso crece cada día más y ocupa la botella por completo. Es tan grande que no puede salir por el cuello de la botella, demasiado pequeña. Y el koan consiste en sacar el ganso sin matarlo y sin romper la botella. Realmente complicado.
¿Qué hacer? El ganso es demasiado grande; no se puede sacar de la botella a menos que se rompa, pero eso no está permitido. También se puede sacar al animal matándolo, pero tampoco está permitido. El discípulo medita día tras día, piensa esto, lo otro, no encuentra solución, porque enrealidad no existe.
Cansado, realmente agotado, de repente tiene una revelación, de repente comprende que al maestro no le interesan ni la botella ni el ganso, que deben de representar algo distinto. La botella es la mente, tú eres el ganso... y si actúas como testigo, es posible. Sin estar en la mente, puedes identificarte tanto con ella que empiezas a notar que estás en ella. El discípulo va corriendo a ver al maestro y le dice que el ganso está fuera. El maestro replica: "Lo has comprendido. Déjalo fuera. Nunca ha estado dentro"
Si continúas luchando con el ganso y la botella, jamás resolverás el problema. Se trata de darte cuenta de que, efectivamente, debe representar otra cosa, porque si no el maestro no te lo plantearía. ¿Y qué puede ser, si tenemos en cuenta que toda la relación entre maestro y discípulo se refiere a la mente y la conciencia? La conciencia es el ganso que no está dentro de la botella de la mente, pero tú crees que sí está y no paras de preguntar a todo el mundo cómo sacarlo. Algunas personas te ayudarán, con ciertas técnicas, per no comprenden el asunto, en absoluto.
Como el ganso está fuera y nunca ha estado dentro, no se plantea el problema de sacarlo.
La mente es una sucesión de pensamientos que desfila frente a ti en la pantalla del cerebro. Tú eres un observador, pero empiezas a identificarte con cosas bonitas, que te engatusan. Y en cuanto quedas atrapado por las cosas bonitas también quedas atrapado por las cosas feas, porque la mente no puede existir sin dualidad.
La conciencia no puede existir con dualidad, mientras que la mente no puede vivir sin ella. La conciencia no es dual, y la mente sí. De modo que ojo: yo no te enseño soluciones. Te enseño la única solución, que consiste en retroceder y mirar. Has de crear una distancia entre tu mente y tú.
Tanto si es algo bueno, hermoso, algo que te gustaria disfrutar de cerca, como si es algo feo, mantenté lo más lejos posible. Miralo como podrías ver una película. El problema es que las personas se identifican incluso con las peliculas.
Puedes indentificarte con cualquier cosa. La gente se identifica con otras personas y así crean su propia desdicha. Se identifican con cosas y se sienten desgraciados si le faltan esas cosas.
La identificación está en el origen de toda desdicha, y toda identificación se realiza con la mente.
Hazte a un lado, y cede el paso a la mente. Muy pronto comprenderás que no existe ningún problema, que el ganso está fuera. Ni tienes que romper la botella ni matar al animal.
Osho: "El libro del ego: liberarse de la ilusion"
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